5 de diciembre de 2011

Premio Escrituras de la Memoria



(FOTO: Ministro de Cultura de Chile Luciano Cruz-Coke y escritor Waldemar Verdugo, 24 de noviembre de 2011)

Debo agradecer al Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de Chile la distinción “Escrituras de la Memoria” 2011, que recibí en el magnífico auditorio del Museo de la Memoria en Santiago, un alto honor que me anima. “Creemos en la lectura y en la escritura como una posibilidad de crecer, de ser libres, de aprender y de entretenernos. Fomentamos, estimulamos y celebramos mediante estos premios la creación literaria del país”, señaló la Secretaria Ejecutiva del Consejo Nacional del Libro y la Lectura, Paz Balmaceda. En la oportunidad también fueron distinguidos Alberto Kurapel, por su obra “El Actor Performer”, Walter Ibáñez, por “El trinar del Gorrión”, y Roberto Sandoval por “Carta de las antípodas”. Fue reconocida mi obra “María Luisa Bombal: una huella”, que rescata fragmentos del trabajo de la escritora chilena en el extranjero, en la voz de amigos suyos que pude entrevistar para revista Vogue en la década de 1980: Jorge Luis Borges, Gabriel García Márquez, Juan Rulfo y John Huston. Fragmentos de este trabajo se pueden leer en Internet bajo el nombre “La Abeja de Fuego”. Recibí el premio de manos del Ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, un hombre de buen humor y sencillo, se nota comprometido con su trabajo, que explica la razón de ser hoy por hoy uno de los políticos mejor evaluados de Chile. A través de él, le envié mi agradecimiento a su equipo de trabajo, y al jurado de este año, compuesto por ocho personalidades de la cultura chilena, a ninguno de los cuales tengo el honor de conocer personalmente, sin dudas lectores de María Luisa Bombal, como yo, porque no fue otro espíritu el que me guió a testimoniar acerca de una de las dos más altas escritoras de Chile, la otra es Gabriela Mistral.